Compañeros y compañeras,
En este significativo día del Primero de Mayo, celebramos la fuerza y la resiliencia de la clase trabajadora en todo el mundo. Hoy, conmemoramos no solo las luchas del pasado, sino también renovamos nuestro compromiso con la justicia social y laboral del presente y el futuro.
El Primero de Mayo se traduce en un recordatorio de la lucha constante de los trabajadores y trabajadoras por condiciones laborales dignas, por salarios justos, por derechos laborales fundamentales y por un mundo donde la equidad y la solidaridad constituyan los pilares de nuestra sociedad.
En el Partido Unión Republicana, nos manifestamos en solidaridad con todas las personas que luchan día a día en fábricas, en campos, en oficinas, en hospitales, en escuelas y en todos los rincones donde se crea riqueza y se sostiene la vida. Reconocemos su valentía, su sacrificio y su contribución imprescindible a nuestras comunidades y a nuestra sociedad en su conjunto.
Sin embargo, también debemos reconocer que la lucha está lejos de terminar. A pesar de los avances logrados, la desigualdad sigue siendo rampante, la explotación persiste y los derechos laborales son amenazados por intereses mezquinos que buscan aumentar sus ganancias a expensas de la dignidad y el bienestar de la clase trabajadora.
Es por eso que hoy reafirmamos nuestro compromiso con las siguientes demandas:
1. Salarios dignos y condiciones laborales justas: Defendemos salarios que permitan una vida digna, condiciones de trabajo seguras y saludables, horarios justos y respeto a la conciliación entre la vida laboral y la vida personal. Además, respaldamos la reducción de la jornada laboral a 35 horas semanales, lo cual promueve un equilibrio más saludable entre el trabajo y la vida personal. Esta medida no solo contribuye a mejorar la salud mental y física de los trabajadores y trabajadoras, sino que también fortalece el bienestar general en el entorno laboral.
2. Protección de los derechos laborales: Nos oponemos firmemente a cualquier intento de debilitar los derechos laborales fundamentales, incluido el derecho a la sindicalización, el derecho a huelga, el derecho a la negociación colectiva y el derecho a condiciones de trabajo justas y equitativas para el conjunto de la clase trabajadora.
3. Igualdad de oportunidades y combate a la discriminación laboral: Abogamos por políticas que promuevan la igualdad de oportunidades en el lugar de trabajo, eliminando cualquier forma de discriminación basada en el género, la etnia, la orientación sexual, la religión o cualquier otra circunstancia personal, incluida la discapacidad. Por todo ello, exigimos que se garantice el acceso al empleo digno y que se creen entornos laborales inclusivos que respeten y valoren la diversidad.
4. Promoción del empleo juvenil y apoyo a trabajadores mayores de 45 años: Reivindicamos más iniciativas destinadas a fomentar el empleo entre los jóvenes, ofreciendo programas de formación, prácticas remuneradas y oportunidades laborales adecuadas a sus habilidades y aspiraciones. Además, consideramos que deben establecerse más ayudas e incentivos para la contratación de personas mayores de 45 años, reconociendo su experiencia y conocimiento como activos valiosos para el mercado laboral.
5. Protección social y bienestar: Demandamos sistemas de protección social sólidos que garanticen el acceso universal a la salud, a la educación, a la vivienda digna y a una jubilación digna para el conjunto, sin importar su situación laboral o su condición socioeconómica.
7. Transición justa y sostenibilidad ambiental: Promovemos una transición justa hacia una economía sostenible que respete el medio ambiente y que garantice empleos dignos y seguros, protegiendo especialmente a aquellos trabajadores y trabajadoras afectados por los cambios en las industrias más contaminantes.
En este Día Internacional de los Trabajadores/as, renovamos nuestro compromiso con la causa de la justicia social y laboral. Nos comprometemos a seguir luchando en sociedad por un futuro donde el trabajo sea valorado, donde la dignidad humana sea innegociable y donde la igualdad y la solidaridad sean los cimientos sobre los que se construyen nuestras sociedades.
¡Adelante, compañeros y compañeras! ¡La lucha sigue!
¡Viva el 1 de mayo! ¡Viva la clase trabajadora! ¡Viva la República!
Comisión Ejecutiva Nacional de Unión Republicana